En Julio de este año, la revista Pediatrics publicó un artículo respecto a aditivos alimentarios de consumo común, así como su relación con problemas importantes en salud infantil, principalmente con trastornos hormonales e incluso de conducta.

No somos conscientes de la cantidad de químicos nocivos que tienen los productos procesados y al ser de tan fácil adquisición consideramos que son inocuos, sin saber las consecuencias a largo plazo de su consumo.

Mucho se escucha de la "dilatación" como parte de la labor de parto, sin embargo suele haber confusión en cuanto a la anatomía se refiere.

Si bien no hay tiempo definido, la mayor parte de las contracciones durante el parto están destinadas a ayudar al cuello del útero (cérvix) a reducir su grosor (lo que es el borramiento) y a abrir (dilatación) para que de esta manera el bebé salga del útero y haga su viaje final a través de la vagina antes de dar su primera respiración.

La dilatación se mide en cm, desde 0 que es el cérvix cerrado hasta 10 cm aproximadamente que es lo que mide en promedio el diámetro de la cabeza de un bebé (puede ser un poco menos o un poco más). Como parte del procedimiento médico se ha utilizado el famoso "tacto" para medir con los dedos la apertura aproximada, sin embargo no es indispensable estar realizando esta maniobra con tanta regularidad, ya que hay otros parámetros que nos ayudan a determinar el avance del parto.

Un parto respetado procura la menor cantidad de procedimientos invasivos, respetando la comodidad e intimidad de la madre, por lo que bien es importante mantener un equilibrio entre una vigilancia adecuada y el respeto al momento de la atención.

Semana del Parto Respetado 
"Menos intervenciones, más cuidados"

Ésta es la frase clave en el 2018 para conmemorar la semana del parto respetado. En lo personal considero que es muy apropiada para definir el concepto del parto respetado o lo que se ha venido conociendo como parto humanizado.

Si desde el embarazo se toman los cuidados pertinentes en todas las esferas de la futura madre (la esfera física, mental y emocional entonces se están sembrando las mejores semillas para el momento del nacimiento del bebé, ya que se están previendo las mejores condiciones.

La información es un factor fundamental, ya que una mujer bien informada sabe de la variedad de opciones con las que cuenta y no sólo en cuanto a la posibilidad de un parto, sino a que la recepción de su bebé sea en las condiciones más amables y favorables para ambos.

Entre menos intervenciones realicemos en un parto, menos probabilidades de complicaciones hay, ya que estamos permitiendo el desarrollo natural del mismo.

El personal de salud estamos para apoyar, acompañar y realizar intervenciones en caso de que existan complicaciones, pero de no existir éstas lo mejor que podemos hacer es brindar es una atención expectante y cálida, observadores del milagro de la vida.

Dra. Carolina Gómez